Desde la experiencia y atravesando los distintos momentos y decisiones que ha tenido que ir tomando en estos dos últimos años se presenta una transformación personal y profesional con un espectacular giro de 180º.

Este giro ha sido de un más al menos en todo lo material y en todo lo que para esta sociedad significa el éxito y sin embargo a supuesto un ir de menos a más en alcanzar la plena felicidad, de repente la frase “nunca he sido tan feliz con tan poco” cobra un sentido esencial.

Anabel Castro pretende aportar su experiencia para transmitir que si ella ha podido coger las riendas de su vida, empezar a conocerse a sus 48 años y cambiar su tranquilidad y seguridad por la más absoluta incertidumbre, cualquiera puede hacerlo.

Ha supuesto el romper con todas las normas y clichés preestablecidos y asumidos por la sociedad, lo que siempre queremos hacer y nunca nos atrevemos  a hacer. Un ejemplo de que la valentía no es más que escucharnos a nosotros mismos para saber que lo que vamos a hacer, es lo único que podemos hacer, no tenemos opción cuando empezamos a escucharnos, desaparecen los “tener que”, debería de” ya sólo existe el ser uno mismo y dar tu mejor versión.

La más absoluta incertidumbre le ha traído paz, sosiego, fuerza, ilusión y sobre todo el estar viviendo la felicidad en el día a día sin forzarlo, simplemente siendo ella.

Es la prueba viviente de que la felicidad sólo depende de uno mismo y cuando empezamos  a buscarla en nosotros mismos, de repente, el mero hecho de vivir se convierte en una experiencia apasionante, el aprender a confiar en la vida sin esperar atrae la magia a tu vida.